10.- Llegar tarde a la misa, entrar corriendo en mitad del sermón y empezar a anudarte la corbata mientras el resto canta: ♪ gloria gloria aleluya ♪
9.- Lanzar directo a la cabeza del novio la bolsita completa de arroz que te dieron y echarle todo el líquido para soplar burbujas en el vestido a la novia al momento que salen de la iglesia
8.- Abrazar al papá de la novia diciéndole “felicitaciones por quitarte una carga de encima”
7.- Con completo desconocimiento de causa preguntarle a los flamantes esposos “y cuántos meses de embarazo van?” o “ya saben que nombre le van a poner su bebé?”
6.- Darle 5,00 dólares (incluyendo monedas de 25 y 50 centavos) al mesero para garantizar la provisión suficiente de whisky toda la noche.
5.- Preguntar impertinentemente por qué no le invitaron a esa prima fishfica de la novia que tiempo atrás se vacilo al flamante marido y puso en peligro el largo noviazgo y compromiso de los nuevos cónyuges
4.- Darle de tomar 4 whiskys seguidos a tu cuñado holandés y luego ponerle a bailar reguetón con la madre del novio.
3.- Agarrarte los genitales mientras posas junto a los novios para la foto de rigor
2.- Desaparecer súbitamente durante mas de una hora para irte a ver un “chow” en ese bonito y exclusivo club de caballeros ubicado a la vuelta del hotel donde se realizaba la recepción y regresar con tus dos panas que “casualmente” encontraste en el elegante sitio antes mencionado
1.- Quitarle el sombrero y el micrófono al mariachi contratado y ponerte a cantar tu “propia versión” de El Aventurero
BONUS:
9.- Lanzar directo a la cabeza del novio la bolsita completa de arroz que te dieron y echarle todo el líquido para soplar burbujas en el vestido a la novia al momento que salen de la iglesia
8.- Abrazar al papá de la novia diciéndole “felicitaciones por quitarte una carga de encima”
7.- Con completo desconocimiento de causa preguntarle a los flamantes esposos “y cuántos meses de embarazo van?” o “ya saben que nombre le van a poner su bebé?”
6.- Darle 5,00 dólares (incluyendo monedas de 25 y 50 centavos) al mesero para garantizar la provisión suficiente de whisky toda la noche.
5.- Preguntar impertinentemente por qué no le invitaron a esa prima fishfica de la novia que tiempo atrás se vacilo al flamante marido y puso en peligro el largo noviazgo y compromiso de los nuevos cónyuges
4.- Darle de tomar 4 whiskys seguidos a tu cuñado holandés y luego ponerle a bailar reguetón con la madre del novio.
3.- Agarrarte los genitales mientras posas junto a los novios para la foto de rigor
2.- Desaparecer súbitamente durante mas de una hora para irte a ver un “chow” en ese bonito y exclusivo club de caballeros ubicado a la vuelta del hotel donde se realizaba la recepción y regresar con tus dos panas que “casualmente” encontraste en el elegante sitio antes mencionado
1.- Quitarle el sombrero y el micrófono al mariachi contratado y ponerte a cantar tu “propia versión” de El Aventurero
BONUS:
Llevarte un cenicero de 60 cm. de alto, una botella de champagne que inexplicablemente apareció en tus manos y el esferográfico aniñadísimo con el cual apuntaste tu email para que te manden las fotos de la fiesta.
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